jueves, 28 de marzo de 2019

Dos próceres olvidados de la independencia de Lambayeque. Melchor Sevilla Navarrete y Juan del Carmen Casós Barrionuevo.

Plaza "Independencia" en Lambayeque. Inaugurada el 27 de diciembre de 1820 (Colección: Miguel Ángel Díaz Torres, 1929)

Si bien es cierto, los trabajos en pro de la revolucionaria empresa por la emancipación política, del opresor régimen español, en el pueblo de San Pedro de Lambayeque, estuvieron a cargo de entusiastas patriotas nacidos en su fértil suelo, lo es también, que en todo lo que significó este supremo esfuerzo, actuaron a su lado, codo a codo, algunos personajes oriundos de otros rincones del Perú. Estos se encontraban avecindados en esta santa tierra por diversos motivos y desde hacía un buen tiempo atrás.

Casos notables: el de don Melchor Sevilla, alcalde de segunda nominación del cabildo lambayecano y teniente del escuadrón de milicias disciplinadas de Pacasmayo. Sevilla, en acto patriótico, proporcionó el domicilio donde residía, para que en él se reunieran los miembros del cabildo en horas de la noche del 27 de diciembre de 1820.

Esa memorable noche, después de leer, ávida y detenidamente, los capítulos de “las diversas cartas” escritas por el general don José de San Martin y Matorras a varios de sus componentes y luego de tensa y alturada deliberación, acordaron, por unanimidad, redactar la histórica acta de la jura de la independencia absoluta del poder español del pueblo de Lambayeque.

Todo esto, días antes que la ciudad de Trujillo, capital de la intendencia del mismo nombre y a la que pertenecía el partido de Lambayeque, proclamara su independencia el 29 de diciembre de 1820, y siete meses antes del día en que el ilustre argentino capitán general don José de San Martín pronunciara en la plaza mayor de Lima, e hiciera pregonar a tambor batiente por calles y plazas de la capital, la mañana del 28 de julio de 1821, su célebre proclama:

    “El Perú es desde este momento, libre e independiente por la voluntad general de los pueblos y por la justicia de su causa que Dios defiende”.

Lambayeque se convierte así en el primer pueblo en proclamar exitosamente su independencia en todo el norte del Perú.

El otro caso es el del limeño don Juan del Carmen Casós Barrionuevo, Sargento Mayor por su Majestad del Regimiento de Infantería de Milicias Disciplinadas de Lambayeque y Chiclayo, grado que ostentaba al momento de la insurrección, además del cargo de regidor perpetuo del ilustre cabildo de Saña en el partido de Lambayeque.

Autográfa del general Juan del Carmen Casós Barrionuevo

A su mando y ordenes se encontraban los reconocidos próceres lambayecanos don Juan Manuel Aniceto Iturregui Aguilarte, capitán de milicias de caballería de Ferreñafe, y el capitán don Juan Pascual Saco Oliveros, capitán de milicias de infantería del pueblo de Lambayeque, ambos de notable actuación la noche en que Lambayeque juró de facto ser libre de toda opresión, rompiendo con este sublime acto las ligaduras que la ataban al régimen peninsular.

Juan del Carmen Casós Barrionuevo, nació en la ciudad de Lima, capital del virreinato del Perú. Fue miembro activo del “Club Patriótico” o “Sociedad Secreta” fundada por Juan Manuel Aniceto Iturregui Aguilarte, además de eficaz colaborador de la independencia de Lambayeque.

Producido el revolucionario pronunciamiento contra el régimen español, la memorable noche del 27 de diciembre de 1820, Casós, en su calidad de comandante militar de la plaza, se mantuvo al frente dirigiendo con firmeza el accionar de los patriotas lambayecanos. Fue él, quien comisionó al valiente y entonces capitán de milicias disciplinadas de Lambayeque don Juan Pascual Saco y Oliveros, intimara la rendición de los oficiales realistas del Escuadrón de Dragones acantonado en la casa de la “Aduana”, hoy sede de la Institución Educativa “27 de Diciembre”. 

Local de la antigua Aduana de Lambayeque. Sede temporal del Escuadron realista en esta ciudad (Memo Luna, 2010)
Juan del Carmen Casós, recibió el despacho de general de brigada el 30 de noviembre de 1821, y estaba incluido, en calidad de asociado, a la Orden del Sol desde el 12 de diciembre del citado año, conjuntamente con el prócer lambayecano don José Rivadeneira y Tejada. El 10 de octubre de 1825, Casós, fue condecorado por el Congreso con la “Medalla de Honor del Libertador”, por sus caros servicios prestados a la campaña final de la independencia del Perú. 

Fue hijo legítimo de don Juan Carlos Casós, natural de Francia, y de doña María Ángela Barrionuevo, oriunda de la ciudad de Lima. Su padre ostentaba el pomposo título de Médico y Cirujano por su Majestad en todos sus dominios y Teniente de Protomédico por el Real Protomedicato del Supremo Gobierno de este Reino. Radicaba en Lambayeque desde aproximadamente mediados del siglo XVIII, hasta que acaeció su muerte en 1787. 

Después de una ardua investigación, hemos comprobado que en todo ese tiempo el médico francés vivió con su familia en la mansión virreinal ubicada en la vereda izquierda de la primera cuadra, saliendo de la plaza principal, de la antigua cuadra del “Cabildo” después calle de “San Roque”, hoy calle “2 de Mayo”, colindante con la vieja esquina denominada, en el siglo XVIII, “del Mascarón”. 

Casona virreinal en la que desde, aproximadamente, las cuatro últimas décadas del siglo XIX, viviera también el cónsul de Inglaterra en esta ciudad, don Guillermo Valentín Fry. De ahí que la casa fuera, en su momento, sede del consulado de ese país en Lambayeque.

O sea, y para más detalles, en la casa que adquiriera, a principios del siglo XX, don Augusto Castillo Muro, casado con la poetisa doña Juana Rosa Sime Manuel de Villena, padres del historiador lambayecano Augusto Castillo Muro Sime.

Casa donde viviera el general don Juan del Carmen Casós Barrionuevo
El prócer Juan del Carmen Casós Barrionuevo, dejó de existir en la ciudad de Cajamarca, el 20 de agosto de 1826, a la edad de 72 años. No cabe duda que el tiempo fue el motivo principal para que sus restos no fueron conducidos a Lambayeque, dado lo dificultoso y largo del trayecto. Con esto no se cumplió uno de sus más caros deseos, el de ser sepultado a los pies del retablo de Nuestra Señora de las Mercedes en la iglesia parroquial de Lambayeque. Sus honras fúnebres, se efectuaron el 22 de agosto de 1826, en la iglesia catedral de Cajamarca, conocida también como la iglesia matriz de Santa Catalina o del Sagrario, situada en el centro de la ciudad, al noroeste de la Plaza de Armas.

Tenemos felizmente a la vista copia certificada de la inédita partida de defunción del general Casós Barrionuevo, y para que conste la trascribimos literalmente:

El que suscribe Secretario del Obispado de Cajamarca

CERTIFICA

Que en el Archivo General de la Diócesis de Cajamarca, de la Parroquia del Sagrario, en el Libro N 1/D-5/9 y pagina N 5; se encuentra la partida de defunción siguiente:

Al margen.- Juan del Carmen Casos.-----------------------------

        Año del Señor de mil ochocientos veintiséis en veintidós de agosto, se enterro de mayor en su propia Iglesia el cadáver de Dn. Juan del Carmen Casos, de edad de setenta y dos años, hijo legitimo de Dn. Juan Casos y de Da. Angela Barrionuebo del Castillo, casado y velado con Da. Maria Francisca Bonifaz de cuyo matrimonio no deja hijo alguno no testo ni hubo mas Sacramento que la Extremaucion, por la celeridad de su muerte y para que conste lo firmo de que certifico (sic).

Es copia fiel del original citado.

Cajamarca 01 de Julio de 2014.
                                            
                                              Cesar L. Urrelo Álvarez.
                                                           Secretario                                           

Tanto Juan del Carmen Casós Barrionuevo como Melchor Sevilla Navarrete, fueron declarados próceres de la Independencia Nacional por Ley N 15721 emitida por el Congreso Nacional del Perú el 28 de octubre de 1965. En esa oportunidad también recibieron esta honrosa distinción los lambayecanos: Juan Manuel Iturregui Aguilarte, Pedro Antonio López y Vidaurre, José María Muga, Eugenio Crisanto Yerren, Pedro Yuyas, Valentín Mondragón, Mariano Quesada y Valiente, José Díaz de Arellano, José Manuel Otiniano, parece que fue natural de Trujillo, y Juan Manuel Poemape, este último, natural de San Pedro de Lloc.

Ahora bien, la población lambayecana está tomando conciencia en el sentido de que el Acta de declaración de la independencia de Lambayeque, del 27 de diciembre de 1820, no se firmó en la casa de la "Antigua Logia" o "Casa Montjoy", sino en los ambientes de la desaparecida “Casa Salcedo”, ubicada a espaldas de la iglesia parroquial de esta ciudad. Eso es bueno.

La histórica y desaparecida casa "Salcedo" en Lambayeque (Brüning, 1911
En esta histórica mansión moraba el acaudalado comerciante don Melchor Sevilla Navarrete, que sabemos no era oriundo de Lambayeque. Sevilla estuvo casado con la no menos acaudalada dama lambayecana doña María Villodas, de rancia y aristocrática familia, avecindada en esta ciudad después de la ruina que asolara la engreída villa de Santiago de Miraflores de Saña, en marzo de 1720.

La familia de doña María Villodas era propietaria, desde hacía mucho tiempo atrás, de la histórica casa, hoy lamentablemente desaparecida. De ahí deviene, el porqué de la residencia de Sevilla en esta casa. Antiguo solar de los caciques del pueblo, después, mansión señorial y solar patricio de los los Martínez y Ripalda, los Villodas y Martínez, los Peramás Villodas, los Salcedo Peramás, los Salcedo Taforó, los Salcedo Ruiz. En está "casa grande", como antaño la motejarán, vivió, los siete primeros años de su vida, el presidente del Perú don Augusto Bernardino Leguía y Salcedo, hijo de don Nicanor Leguía y Haro y de doña Águeda María del Carmen Salcedo Taforó, y por ende, sobrino de don Manuel y don Bernardino Salcedo Taforó.
 
Del matrimonio de don Melchor Sevilla y doña María Villodas vino al mundo, en 1812, doña Narcisa Sevilla Villodas, que, en 1829, desposó con don Joseph Mariano Pantaleón Pastor Martínez de Tejada. Durante su matrimonio procrearon 5 hijos, todos varones, el último de estos vástagos nombrado José Mariano Pastor Sevilla, nacido en la ciudad de Lambayeque en 1837, murió combatiendo heroicamente en la batalla de Miraflores, el 15 de enero de 1881, en el marco de la guerra del Pacifico.

Es bueno saber que el matrimonio antes mencionado, tuvo como morada una de las casas que poseía en Lambayeque don Mariano Pantaleón Pastor Martínez de Tejada, y es la que ahora se conoce como casa “Aguilar Pastor”, ubicada en la antigua calle de "San Roque" hoy "2 de Mayo", declarada Patrimonio Cultural de la Nación en 1989. Una placa recordatoria, colocada en uno sus amplios muros, debería perennizar el nombre de tan valiente como ilustre coronel lambayecano. Debemos agregar también que en esta casa vivió gran parte de su niñez el laureado poeta, natural de Motupe, don Emiliano Niño Pastor.

Casa "Aguilar - Pastor", en Lambayeque. 
Parece que Melchor Sevilla, después de desposar a María Villodas, tuvo un hijo en San Pedro de Lloc, lugar donde poseía una bien montada panadería. Para mí, en particular, creo que el filántropo sampedrano José María Sevilla Escajadillo, que naciera en San Pedro de Lloc, en 1813, y dejaráde de existir en Lima, en 1886, sería el hijo que Melchor Sevilla tuvo, en esa ciudad norteña, en doña Catalina Escajadillo.

José María Sevilla Escajadillo

Nuestra hipótesis, en cuanto al cercano parentesco entre Melchor Sevilla y José María Sevilla Escajadillo, se basa fundamentalmente en el testamento de este último, fechado en 1885; sobre todo en lo que concierne al legado, que en libras esterlinas, donara a sus familiares y amigos, buena parte de los primeros emparentados con la familia Salcedo en Lambayeque. No cabe duda, que este importante instrumento los entronca de alguna manera.

De paso hemos podido constatar también, indagando en la antigua papelería que se custodia en los anaqueles del Archivo Regional de Lambayeque (ARL), que Melchor Sevilla tuvo como socio principal, en algunos de sus pingues negocios, a don Manuel Custodio Salcedo Peramás, aquel hijo del español Manuel López de Osaba Salcedo y de la acaudalada dama lambayecana doña Tomaza de Peramás Villodas.

Para terminar, creemos que sería de sumo interés, para el mejor conocimiento de nuestra incipiente historia regional lambayecana, saber de donde era oriundo don Melchor Sevilla Navarrete.

Felizmente, gracias a los datos proporcionados por el distinguido historiador y genealogista peruano Antonio Borda, radicado en España, sabemos, ahora, que el prócer don Melchor Sevilla se encuentra sepultado en un nicho perpetuo en el antiguo cementerio “Presbítero Maestro” de la ciudad de Lima.

PD. Estamos a punto de concluir con una breve semblanza biografía del general Juan del Carmen Casós Barrionuevo. trabajo que nos propusimos realizar desde algún tiempo atrás y que lo publicaremos en su oportunidad. En el consignamos inéditos datos sobre su vida. Quiero agradecer, de paso, a mi dilecto amigo el abogado Carlos Monteza Delgado, por haberse tomado el trabajo de viajar a la ciudad de Cajamarca y remitirme el, hasta ese momento desconocido, certificado de defunción del general Juan del Carmen Casós Barrionuevo, que con antelación había yo solicitado a la Diócesis de Cajamarca.